Viaje escocia -islas orcas y hébridas exteriores



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Día 4 de agosto (jueves)

Ruta: Stornoway (Isla Lewis)-Puerto Ness (Isla Lewis)

Por la mañana tenemos tiempo dar una vuelta por el parque y el entorno del castillo antes de poder entrar en el Museo Nan Eilean, el horario es de 10,00 horas a las 17,00 horas, la entrada es gratuita.

El museo fue inaugurado recientemente, julio de 2016, es un amplio pabellón situado a la entrada del castillo de Lews, entre sus fondos se presenta es una pequeña introducción a la cultura de las islas Hébridas y su adaptación al medio natural durante siglos.

Una de las salas nos muestra imágenes con una proyección en tres pantallas que son desgarradoras donde se pueden ver desde distintos ángulos las islas durante todo el año, lo que nos indica que el mismo lugar sufre una trasformación asombrosa convirtiendo un paraje de ensueño en un lugar que verdaderamente se cristaliza en inquietante.

Quizás las piezas más importantes del museo son el llamado Ajedrez de la Isla de Lewis es un conjunto de setenta y ocho piezas de ajedrez, junto a catorce tableros y una hebilla de una bolsa, de la época medieval que fue encontrado en la isla de Lewis, en Escocia, en circunstancias no esclarecidas. Las piezas de ajedrez están talladas en su gran mayoría de marfil de morsa, se presume que sean de origen escandinavo y que hayan sido realizadas en la segunda mitad del siglo XII. Las figurillas están talladas minuciosamente, con expresiones de asombro en sus pequeñas caras.

Constituyen, con mucho, el mayor conjunto de piezas de ajedrez antiguas jamás encontrado; debido a su antigüedad, la gran cantidad, el perfecto estado y la habilidad que demuestran sus maestros en su manufactura, son figuras muy importantes de la Edad Media, atestiguando el nivel de la producción artesanal en el norte de Europa en la Baja Edad Media, la fuerte conexión cultural y política entre los países escandinavos y las islas británicas en aquella época, además de la creciente popularidad del juego de ajedrez en el continente europeo. Sesenta y siete de las piezas se encuentran en el Museo Británico de Londres, y los once restantes se encuentran en el Museo de Escocia.

Al parecer, un residente de Stornoway, Roderick Ririe, fue el que llevó el descubrimiento al público por primera vez en una reunión de la Sociedad de Anticuarios de Escocia, el 11 de abril de 1831, en Edimburgo. Posteriormente, la Sociedad de Anticuarios intentó adquirir las piezas, pero antes de que pudieran recaudar fondos, un relojero de Edimburgo, T. A. Forrest, intervino para realizar la compra. Luego Forrest vendió 67 piezas al Museo Británico, junto con 14 tableros y una hebilla que completan el hallazgo. Las diez piezas de ajedrez restantes fueron vendidas en secreto a un coleccionista escocés, Charles Kirkpatrick Sharpe. En paralelo, este coleccionista –no se sabe como– consiguió además un alfil directamente de la isla. En 1888, la Sociedad de Anticuarios, finalmente, logró comprar las once piezas que se encontraban en posesión del coleccionista y las expuso en el Museo de Escocia.

Existen versiones contradictorias acerca de cómo se encontraron las piezas. De acuerdo con la historia más conocida, Malcolm MacLeod, un campesino local habría encontrado las piezas enterradas bajo un banco de arena de más de cuatro metros de altura en la bahía de Uig, en la costa oeste de la isla de Lewis, algún tiempo antes de ser expuestas. Esta historia, sin embargo, surgió bien posteriormente y probablemente se deba a un juglar local. Relatos más antiguos y más fiables, incluyendo el del propio Sharpe, indican que las piezas estaban dentro de una cámara redonda de piedra, posiblemente de un taller, situado próximo a las ruinas de un monasterio que habrían existido en la región llamada Taigh nan Cailleachan Dubha, o “Casa de las Mujeres Negras”. De hecho, la existencia de este convento en Mèalasta, a unos diez kilómetros al sur de Uig Bay, está atestiguado en 1709. Sin embargo, no parecería existir ningún otro registro documental o ruina en el lugar que corroboren esta fuente. En cambio, las estructuras subterráneas que datan de la Edad del Hierro son comunes en la región; una en particular, que consistía en galerías que daban a una cámara cuya descripción se asemeja a la del relato de Sharpe, se atestigua en Mèalasta, que ha llevado a algunos estudiosos a preferir la cámara subterránea como la ubicación más probable para el descubrimiento de las piezas. Además, los registros de asignación de la parroquia de Uig de los años 1852 a 1853 mencionaron piezas de ajedrez encontradas en las ruinas de un convento unos setenta años antes. Por lo tanto, no se debe descartar que las piezas hubieran sido encontradas a finales del siglo XVIII y permanecido en posesión de algún habitante de la isla hasta su venta posterior.

Las piezas son de estilo románico, predominante en Europa durante los siglos XI-XII. Sin embargo, el establecimiento de la fecha probable de su producción está basado sobre todo en el diseño de las mitras de los alfiles, representados por obispos. Estas presentan un formato que entró en uso, aproximadamente, a partir de 1150. Antes de eso, la división de los sombreros de los obispos era de atrás hacia adelante, formando dos picos, izquierdo y derecho, a diferencia de la abertura lateral existente en 2015 y cuya introducción data de aquella época. Alrededor del año 1200, la mitra cambió de nuevo y fue siendo cada vez más y más alta, que difieren de los obispos, alfiles, de Lewis. Por lo tanto, se supone que las piezas habrían sido hechas durante este período que va desde 1150 hasta 1200.

La mayoría de las piezas de ajedrez de Lewis fueron talladas en marfil de morsa, y unas pocas en dientes de ballena. Tienen una altura de entre 4 y 10 cm. Se dividen en ocho reyes, ocho damas, dieciséis alfiles, quince jinetes, dieciséis guerreros (en lugar de las torres) y diecinueve peones, sumando un total de 78 piezas que constituyen cuatro juegos, por lo tanto, incompletos. La altura de las piezas figurativas oscila de 7 a 10 cm y los peones de 4 a 6 cm, aproximadamente. Se cuenta que, cuando fueron encontradas, algunas estaban teñidas de un rojo granate, aunque los estudios científicos no han identificado restos de pintura en las piezas.

Los reyes son retratados como hombres con barba, bigote y pelo largo sobre los hombros. Usan coronas simples pero en diferentes formatos y están sentados en sillas adornadas con varios temas diferentes. Están vestidos con una túnica o manto, lo cual es consistente con la literatura de los países europeos en la Edad Media. Todos sostienen una espada ancha y corta en sus rodillas con vainas simples. Las piezas no son idénticas entre sí presentando algunas características particulares, tales como la ausencia de una barba y bigote en dos piezas. Una pieza encontrada en 1772 en Escocia ha sido identificada y asignada como parte de este mismo conjunto.

Las damas están sentadas en sillas ornamentadas similares a las de los reyes. Usan coronas simples y un velo que cae sobre los hombros y se describe en otra literatura de la época. Visten una túnica con un vestido con mangas cortas por debajo y usan adornos similares a las bandas en las muñecas. La mano izquierda apoya el brazo derecho se utiliza para apoyar la cabeza y que tiene una flexión contemplativa. Las piezas son algo diferentes entre sí en adornos: una de ellas tiene en la mano izquierda un vaso con forma de trompeta y en la otra, un pañuelo. Dos de las piezas son probablemente el mismo conjunto que los reyes encontrados debido a la similitud de las coronas.

Los alfiles utilizan dos tipos de vestimentas sacerdotales: la capa de asperges o casulla que se utiliza en las piezas consideradas más antiguas. Algunas de las piezas tienen adornos grabados y el uso de pañuelos o túnicas. Cinco de las piezas están sentadas en una silla decorada y las demás de pie. Las mitras son bajas y planas con un detalle característico en la parte trasera denominada infulae. Todas las piezas sostienen un báculo con una o ambas manos. Las que sostienen el báculo con una sola mano, en la otra tienen un libro o la mano levantada como señal de bendición.

Los caballos llevan jinetes con barba y bigotes montados que visten un abrigo largo que va desde las muñecas hasta los pies, vestidos con zapatos o botas sin espuelas. Los cascos son en su mayoría cónicos con un protector para la nariz y orejas. En una mano sostienen un escudo largo con algunas inscripciones heráldicas. Debajo del escudo, una espada que está unida a la cintura y en la mano derecha sosteniendo una lanza. Los caballos tienen sillas decoradas con adornos. Las piezas son algo diferentes entre sí en los escudos, usan barbas y cascos.

Las torres están representadas por los guerreros denominados warders o hrokr. Son figuras de pie sosteniendo el escudo y la espada, que llevaba largas cotas de malla hasta el pie y usan cascos en forma cónica variada teniendo algunos el protector nasal. Algunas partes también cubren la cabeza como una capucha. Los escudos tienen diferentes grabados como así también los caballos, además del tamaño que también varía. Algunas de las piezas presentan el escudo al frente y en otros en el lado izquierdo. Las espadas, cuando no están delante del escudo, están en el lado derecho.

Los peones varían en tamaño y forma, pero tienen en común una base octogonal, y solamente dos poseen dibujos grabados. Fueron fabricados de marfil de dientes de morsa y se estimado su confección cerca del siglo XII. Once de las piezas tienen un saliente en la parte superior.

En el 2012 el Museo Británico acordó prestar indefinidamente seis de piezas de ajedrez en al Consejo de las islas occidentales. Ellas las podemos contemplar ahora en el Museo del Castillo de Lews.

Las vitrinas del museo están repletas de numerosos objetos que muestran como era la vida en las islas Hébridas, desde trajes de faena, pasando por trajes de novia. Hay una estantería donde se muestra el famoso Whisky Galore, la historia comienza cuando un barco cargado de Whisky se hundió el 5 de febrero de 1941 durante la Segunda Guerra Mundial cargado con 250000 botellas, los locales iban todos los días a la playa con la esperanza de poder tomarse este famoso Whisky, aún después de tantos años siguen apareciendo botellas en las playas. Hay varias películas que muestran esta historia con tintes cómicos.

Ahora pasamos a ver el Castillo de Lews, esta en reconstrucción la parte alta pero la parte baja se puede visitar, nos sorprende porque esta decorado como un gran salón de bodas con distintas estancias.

Lews Castle fue construido en los años 1844-51 como una casa de campo para Sir James Matheson que había comprado toda la isla unos años antes con su fortuna gracias al comercio de opio chino. Fue diseñado por el arquitecto de Glasgow Charles Wilson.

En 1918, la finca Lewis incluyendo el castillo fue comprado por el industrial Señor Leverhulme de la familia Matheson. Él cedió el castillo a la gente de la parroquia Stornoway en 1923.

Durante la Segunda Guerra Mundial el castillo fue tomado como alojamiento para personal de vuelo y de tierra de 700 Naval Air Squadron, que operaba un destacamento de seis Supermarine Walrus aeronave desde una grada a Cuddy Point en el mismo terreno. La base se conoce como HMS Mentor.

Después de la guerra, el castillo también se utilizó para los alojamientos para estudiantes de Lews Castle College en la década de 1950.

Después de visitar el castillo y el museo hemos visto en la ciudad una estación de combustible en Stornoway que tiene para lavar coches, aprovechamos para vaciar y llenar de agua potable, ya que no nos ponen ningún impedimento y nos facilitan la labor, por supuesto, aprovechamos el favor para llenar el depósito de gasoil y hacer algunas compras en su supermercado. Las coordenadas GPS del lugar corresponden con N58.21575 // W 6.38522.

Salimos desde Stornoway en dirección de Callanish por la carretera A858, nos separan escasos 24 Km. Nada más dejar la capital la carretera se convierte en un solo carril para ambos sentidos, ellos a ese tipo de carreteras le llaman single track roads. Para poder cruzarse y conducir hay una pequeñas plazas, son las passing places, tramos donde el arcén se ensancha para que puedas apartarte si viene un coche en sentido contrario.

Las pequeñas plazas están cada pocos metros, así que casi nunca tendrás que retroceder. Si una passing place está a la izquierda, te corresponde a ti apartarte, y si está a la derecha, tendrá que parar el otro conductor. Si ambos paráis, haz luces para indicar que le dejas pasar. Tras ceder el paso, intercambias un gesto de rigor para dar las gracias y saludar.

El tramo que hacemos por este tipo de carreteras de un solo carril es de 20 km con un tráfico intenso que nos permite estar parando en cada plaza situada cada 200 metros, lo que nos demora el viaje cerca de una hora.

El paisaje que vemos es muy distinto al que hemos podido contemplar en las islas Orcadas donde el verde contrastaba con el cielo azul luminoso, aquí en las Hébridas el verde del suelo ha pasado a un verde más ocre más parecido al que puedes contemplar cuando va madurando las plantaciones de trigo. Aquí aparece una superficie verde de un recubrimiento de turba, las casas son más parecidas a las de Noruega por su construcción simple en base a la madera, los pequeños lagos de color azul oscuro inundan el paisaje.

Las Islas Orcadas destacaban por la importancia de las granjas de vacas y de ovejas, además del cultivo de grandes superficies de terreno para la plantación de forraje para alimento de estos animales. En las islas Hébridas y más en concreto en esta, no vemos ninguna granja todo parece campo sin explotar como un paisaje alpino que carece de árboles y solamente hay plantas de brezos, hierbas y arbustos enanos.

Las Hébridas tiene una gran diversidad de flores silvestres: se puede ver ejemplares de Iris blancos y amarillos; hermosas orquídeas que florecen de forma natural. Entre el final de la primavera y el verano aparecen muchos tipos de flores silvestres entretejiendo una alfombra de flores raras.

Esta parte de tierra en escocés se le da el nombre de Machair esta palabra en gaélico significa fértil llanura cubierta de hierba. Espacios donde abundan las flores que hace que el machair sea tan especial. Los colores cambian a través de la temporada con los amarillos que domina al principio y luego desapareciendo en tonos rojos, blancos y azules.

Continuamos la visita a la isla partiendo hacia el Círculo de Piedras Prehistóricas de Callanish, el parking habilitado para autocaravanas esta situado a unos 150 metros del conjunto histórico, es gratuito. Las coordenadas GPS del lugar corresponden con: N58.19565 // W 6.74379.

Las Piedras de Callanish (o Callanish I), cuyo nombre en gaélico sería Clachan Chalanais o Tursachan Chalanais, son un conjunto de menhires levantados en época prehistórica.

Los vestigios del yacimiento más antiguos están fechados entre el 2900 y 2600 a. C., aunque posiblemente hubiera construcciones precedentes antes del 3000 a. C. Una tumba fue construida dentro del recinto con posterioridad. Los restos provenientes de la destrucción de la tumba sugieren que el lugar quedó en desuso entre el 2000 a. C. y el 1700 a. C.

Los 13 monolitos principales conforman un crómlech de unos 13 m de diámetro, con una larga avenida de acceso flanqueada por piedras en su lado norte, y filas más cortas de piedras por sus lados este, sur y oeste. La disposición general en planta del monumento recuerda la forma de una cruz celta algo distorsionada. La altura de cada uno de los monolitos oscila ente 1 m y 5 m, con un promedio de 4 m, y están realizados en roca de gneis de origen local, de la propia isla de Lewis.

El más alto de los monolitos señala la entrada a un enterramiento cubierto con un montículo de piedras (cairn) en el que se han descubierto restos humanos. Una campaña de excavaciones en 1980 y 1981 mostró que la cámara mortuoria era una adición posterior al monumento, y que había sufrido modificaciones en varias ocasiones.

Se cree que la alineación de la avenida de piedras (mirando hacia el sur) señalaba hacia el punto de ocaso de la luna en el solsticio de verano, por detrás de una montaña distante llamada Clisham.

Los críticos de estas teorías argumentan que pueden existir diversos alineamientos por puro azar en toda estructura de este tipo. Adicionalmente, diversos factores como el efecto de las inclemencias del tiempo y los desplazamientos sufridos por las piedras a lo largo de los siglos, hacen que no se puedan establecer con certeza tales alineamientos, tanto si fueron originalmente así como en cualquier otro caso.

Hay un Centro de Visitantes donde se pueden ver la historia del yacimiento en un horario de 9.30 a 20,00 horas p.m. El monumento se puede visitar libremente con entrada es gratuita, no así el centro de visitantes que exige el pago por su visita.

Cuando terminamos son las 13,00 horas, es la hora de la comida, el vehículo lo hemos dejado aparcado ocupando una plaza de bus en el Circulo Callanish, aunque hay espacio sufienciente para varios autobuses, así que pensamos que será más prudente marcharnos y buscar otro parking más tranquilo. A unos 3 kilómetros encontramos otro parking donde comemos en medio de la naturaleza. Las coordenadas GPS del lugar corresponden con N58.21398 // W 6.73805.

La localidad donde hemos podido parar es Breasclete, esta situado a las afueras, hay un colegio donde hay un parking muy hermoso sin ningún coche, esta amenizado con el sonido del agua de un arroyo cercano y un paisaje memorable con unas vistas al Lago Bharabhat y al fiordo Ceann Hulabahaig, convierte el acto de comer un momento muy agradable. He de indicar que el lugar es un sitio idóneo para la pernocta.

Seguimos el camino por la isla hasta la edificación prehistórica denominada Dun Carloway Broch, el parking para autocaravanas se encuentra como a unos 200 metros del vestigio, es pequeño pero si hay sitio se puede pernoctar. Las coordenadas GPS del lugar corresponden con N 58.26867 // W6.79093.

Tenemos oportunidad de visitar un edificio de piedra que aquí en Escocia se les llamo Bronh, es una torre construida en piedra seca levantada durante la Edad del Hierro escocesa (250 a. C. a 500 d. C.). Este tipo de edificaciones se encuentran en gran número en el norte de Escocia (Caithness y Sutherland), las islas del norte (Shetland, Orcadas) y las Hébridas (Lewis, Skye, Mull, Uist, etc.). Se trata de macizas torres circulares troncocónicas que se pueden elevar hasta 13 metros. El broch, por su forma de castillo, se pensaba que podía servir para proteger a la población durante conflictos tribales pero la falta de aperturas además de una estrecha puerta lo hace improbable. Se piensa que ciertos brochs fueron reconstruidos posteriormente por los pictos.

Existe una definición amplia de brochs según el tipo de base: sólida (representada por Dun Telve) o con una galería continua (Gurness), pero la distinción no es tan clara. Solo Mousa queda con su configuración completa, mientras otros brochs, como Dun Carloway (Lewis), Dun Telve y Dun Troddan (Glenelg), Dun Dornaigil (Sutherland) o Midhowe (Islas Orcadas) solo conservan, a lo más, un tercio de su volumen y de lo que se cree fue la altura original.

Dun Carloway fue construido, probablemente, en algún momento del siglo I a. C., y la datación por radiocarbono de los restos encontrados en el broch evidencian que fue ocupada hasta alrededor del 1300. En la base el broch tiene entre 14 y 15 metros de diámetro y las paredes alrededor de 3 metros de espesor. Tiene planta circular y paredes paralelas que dejan un hueco practicable entre ambas, todo el edificio fue construido sin mortero. Probablemente tenía el suelo de madera, tabiques y techo de paja, necesarios para hacerla habitable, pero la única evidencia que queda de ello son los agujeros para los postes y vigas. Junto con el techo, el estrecho pasadizo presumiblemente asegurado por una puerta de madera, fueron los puntos más vulnerables de la construcción, sobre todo al fuego.

La única apertura hacia el exterior, la puerta de entrada, tiene unas dimensiones inferiores a 107 centímetros de alta por 91 de ancha, siendo el dintel la piedra más grande de toda la construcción.

La doble pared se compone del muro interior, vertical, y del muro exterior con una inclinación que hace que los pasillos inferiores sean fácilmente practicables pero no así los superiores. En la construcción existían, algunas se conservan, aperturas o puertas que daban paso desde el interior a estos pasillos, que se llegan a unir entre plantas por medio de escaleras. Tanto los pasillos como las escaleras están realizados con lajas de piedra que se apoyan en ambos muros. En la planta baja entre ambos muros se abren cuatro habitaciones, en una de las cuales se han encontrado restos de cerámica, la conocida como habitación A. Otra habitación, la D, se abre al pasillo de entrada al broch, por lo que se supone que aloja a quien lo guardaba.

En los muros interiores se aprecia todavía el recrecimiento hecho a unos 2,1 metros para apoyar el suelo que conformaría el techo de la planta baja y piso de la superior.

A pesar de que la estructura ha sido demolida en parte –posiblemente para utilizar los elementos por los isleños en siglos posteriores que utilizaron la piedra para la construcción de viviendas– su estado ruinoso significa que se pueden ver las paredes masivas en sección transversal, y son increíbles. Puede, de hecho, caminar entre ellos y ver los restos de una escalera de caracol que una vez que se abría paso por el interior de la carcasa doble.

La visita a esta torre nos sugiere que estamos ante la primera edificación en altura que hizo el hombre y con el paso de los siglos se denominaría rascacielos. Aunque este edificio no fue edificado en altura ante la falta de suelo, aquí se empleo la altura para unificar el criterio de defensa, varias familias se agrupaban en un espacio constructivo con forma de torre para poder salvaguardar sus propias vidas.

Continuamos la carretera para visitar Blackhause Village, el parking es gratuito y la visita hay que pagar la tarifa familiar de 8,30 £. Las coordenadas GPS del lugar corresponden con: N58.29664//W 6.79102.

Las Casas Negras de Garenin. Son casas hechas de adobe realizadas en el siglo XIX y que estaban habitadas hasta hace sólo 40 años por los locales de la isla. Hay un Museo en el que explican la forma en la que aprovechaban el suelo para formar casas negras impermeables a la lluvia y acogedoras. Hay un pequeño hostal en una de las casas negras. Tranquilos, la casa está restaurada, hay calefacción, duchas, cocina, etc. Podéis pasar la noche calentitos en un lugar muy especial donde ya lo hacían los escoceses hace más de 100 años.

Los blackhouses han visto el ciclo de la vida a través de generaciones de familias. Este tipo de casas fueron ocupadas hasta la década de 1970 cuando los últimos residentes de avanzada edad se trasladaron a un alojamiento donde no era necesario el mantenimiento anual de paja y piedra.

Las viejas casas y sus alrededores fueron declarados un área de conservación poco después de que los últimos residentes las abandonaran ya que no había aquí una oportunidad única para preservar un estilo de construcción de viviendas que habían sobrevivido durante siglos pero que casi habían desaparecido en la última mitad del siglo XX “la blackhouse”. Las paredes de piedra seca son dobles, el perfil bajo de su estructura se acopla muy bien para el momento que sopla el viento ofreciendo menor resistencia y la paja son utilizados en las casas como el mejor aislante para el clima de las Hébridas, y en realidad eran casas ecológicas en que todas los materiales de construcción se empleaban sacados de la naturaleza y extraídos de lugares cercanos a nivel local.

El blackhouse está construido en tierra batida, donde las piedras de base de la pared de pie sobre guijarros para evitar el movimiento. Las gruesas paredes que sirven de aislamiento de la casa se construyen a partir de dos capas de piedras en seco con un relleno de turba coronada con una capa de arcilla para evitar que el agua se introduzca por la pared y luego cubierto con césped que absorbe el exceso de agua.

Las maderas empleadas en la casa se hacen generalmente de restos que se encuentran en las playas, ya que la isla carece de árboles y en algunos casos también se emplea el hueso de la ballena. Sobre el techo de madera se colocó una capa de césped, pero dejando una zona que sirve de chimenea en el caballete del tejado para permitir que el humo del fuego central se escape a través de la paja de avena.

La isla de Lewis es un lugar muy ventoso así la paja debe ser asegurada a las piedras y tejados colocando una malla de cuerda y sujetada por piedras.

El poblado ha sido totalmente rehabilitado y se destinan las casas como hotel, además tienen actividades de arquitectura sostenible y numerosas actividades ecológicas como la calefacción utilizando la turba del campo.

Se puede visitar una de las casas que la mantienen como museo. En su interior nos muestran como era la vida antes de los años de 1970, se pueden ver muebles de varias generaciones que habitaron la casa, además de la vajilla, utensilios de cocina, sistema de calefacción de lavado y secado de ropa, una forma de vida que a nosotros nos parece un tanto cercana porque la hemos vivido en casa de nuestros abuelos. Una de estas casas no son muy diferentes a ciertas hogares en poblaciones rurales de la España profunda en Zamora, Soria o León.

El aumento en el precio del petróleo ha provocado un resurgimiento en la extracción de turba en la isla de Lewis donde participan las mujeres y los niños ahora están también involucrados. Las turberas eran comunes en toda Gran Bretaña, pero la extensión en el aprovechamiento del suelo dedicado a la agricultura e industria, en estos momentos la isla de Lewis es uno de los pocos lugares que quedan en el que se encuentra en grandes cantidades

La turba se corta en tajadas –conocido en gaélico como modas- que son alrededor de un pie de largo, la mitad de un pie de ancho y tres pulgadas de espesor. La turba se apila fuera de la casa hasta que se seca completamente y puede ser utilizada para calentar las estufas de leña en sus hogares. Nos dijeron que cualquier persona que viva en la Isla de Lewis, tienen el derecho de ir y recoger la turba y es gratis. Toda persona con los suficientes conocimientos para ir y desenterrar el turba, y que hacerlo de la manera correcta, puede tener combustible gratis .... ¡si se vive allí

La turba se dice que es un suelo orgánico que tiene más de 60 por ciento de materia orgánica y es superior a 50 cm de profundidad. Aquí en las islas occidentales la profundidad de la turba puede alcanzar hasta veinte pies!

Turberas es un área donde se encuentra la turba, que también se conoce como un pantano o musgo. La turba es realmente descomposición parcial de la vegetación, la parte principal de su composición se deriva del musgo Sphagnum, que se mezcla con la tierra anegada.

Durante mayo y junio, a veces se puede ver a los aldeanos como se dedican al corte de la turba. Los bancos de turba todavía en algunas zonas de las islas se emplean comercialmente. Los mejores bancos son los que tienen los perfiles más profundos. La turba de los niveles inferiores es más densa y se denomina turba negra. La turba de estos niveles tarda más en quemar y caliente más y por lo tanto es más rentable.

Rebanadas de turba se cortan y se ponen a través del páramo a secarse. Hay una herramienta especial, una especie de hierro de turba—tairsgear (el nombre gaélico de la herramienta)— que facilita la extracción de la turba procedentes de losas más profundas, por lo general un pie más o menos de longitud y unos pocos pulgadas de espesor. La herramienta tiene un mango de madera con una cuchilla en ángulo en un extremo. El borde de corte afilado de las rodajas de hierro de turba a través de la turba suave en un movimiento hacia abajo y, con un tirón hacia atrás de la empuñadura principal de la herramienta de un bloque rectangular de turba es arrancado y por lo general esto es arrojado a un lado dejando que se seque en el páramo para poder ser utilizado en unas pocas semanas.

Una vez secas, las turbas serán llevadas a los Croft y por lo general son grandes pilas. Estas pueden ser construidas en varias formas hoy en día, es con forma curvada en cada extremo y afilado a un punto tienen cerca de 2 metros de altura. El apilamiento de la turba sigue las costumbres locales y una pila de turba bien construida puede ser una obra de arte, tanto visual como por su funcionalidad de uso. Puede llevar varios meses para que la turba se seque suficiente y se pueda quemar bien y así que es un largo proceso.

Para acabar el día decidimos marchar hasta la parte más al norte de la isla, se denomina puerto Ness. Nos separan 43 km y el tiempo previsto para el recorrido es de 1h01’, la vía de comunicación es la A858, es una carretera un tanto más correcta que las que hemos viajado durante el día de hoy. El paisaje es muy similar al que hemos visto durante la mañana con grandes paramos sin un alma, pequeñas poblaciones de decenas de casas, muchos lagos que por un momento nos parece que estamos circulando por Finlandia, si pudieramos poner en la imagen los bosques de abetos tendríamos un idéntico paisaje.

El trayecto nos permite ver algunas zonas cercadas dedicadas a la ganadería pero son de pocas reses en la mayoría de ellas, básicamente están formadas por ovejas pero en un número que no llegan a la media docena de ovejas y se ves alguna granja de vacas corresponden con tres o cuatro ejemplares. Las casas de estas granjas se ven que están muy bien construidas y en sus garajes hay buenos coches, barcos y elementos de recreo. Dudamos a que se dedica esta gente y cual es economía real porque es difícil de entender que con cuatro vacas o seis ovejas se puedan disfrutar de estos bienes, ignoramos si las subvenciones sacadas de la extracción del petróleo dentro del ámbito de las islas pueda llegar unitariamente a cada habitante de las islas Lewis.

Antiguamente la economía de isla estaba basada en las granjas cercadas con un tamaño de tres hectáreas dedicadas a la cría de cientos de ovejas y vacas con unas 4000 explotaciones dentro de los 168 municipios de la isla. Había pequeños agricultores y algunos pescadores dedicados al arenque pero la sobreexplotación de los caladeros supuso el abandono de la actividad para casi 3000 personas que tuvieron que marcharse de la isla. La isla tenía una pequeña industria familiar dedicada a la fabricación de tejidos derivados de la lana con sus famosos telares con las conocidas telas de cuadros escoceses, con la llegada de las telas acrílicas ha supuesto también una actual industria testimonial.

Cuando llegamos vemos el puerto pero nos da miedo bajar con la autocaravana por la inclinación y estrechez de la carretera, vemos un parking en un restaurante y pedimos permiso para poder utilizarlo, nos indica que mejor bajemos al puerto que ya tenemos compañía, efectivamente con paciencia hacemos la bajada por un carretera estrecha que nos deja en el mismo espigón de abrigo, pegado a la playa. Las coordenadas GPS del lugar corresponden con: N58.49185//W6.22749.

El parking en el puerto Ness de la Isla de Lewis para autocaravanas es precioso y es un sitio de los que hacen autocaravanismo, es gratuito, tiene para hacer barbacoas y además puedes comprar pescado a los pescadores locales.


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