5.1. Conclusiones parciales
Los artículos son un esfuerzo de la inteligencia eclesiástica destinado a construir un archivo
justificativo que conserve cuidadosamente todos los datos necesarios para la correcta recopilación
de la memoria de los motivos religiosos previos al siglo XX cuyo recuerdo ha sido ultrajado por los
acontecimientos antirreligiosos. Observamos un claro afán por archivar de forma justificada,
aportando referencias y fuentes, los datos sobre los
jurodivye que serán potencialmente
canonizados. El resultado es una redacción de veracidad rigurosa que recoge los hechos destacables
de los distintos
jurodivyje, incluyendo sus visiones, milagros e incluso su apariencia física.
Encontramos en el conjunto resultante todas las piezas necesarias para construir una
vita o un icono.
En definitiva, quedan establecidas las claves necesarias para una nueva emergencia de santidad.
Exceptuando a Anna Peterburgskaja (PE 6) y a Varvara Skvorčichinskaja (PE 9) cuyo
ascetismo es urbano, todos los demás guardan una estrecha relación con comunidades religiosas
monásticas que en cierto modo ejercen un patronazgo sobre el ascetismo. Hay fundamentos para
pensar que de nuevo uno de los cometidos de los monasterios ortodoxos es el hacerse cargo de
personas que, debido a sus discapacidades mentales, no pueden valerse por sí mismas. El caso de
Ioann Bosoj (PE7) refleja claramente dicha tendencia. Los monjes se hacen cargo del disminuido
ofreciéndole un modo de vida mediante el trabajo como ayudante en las cocinas del monasterio.
Posteriormente se interpreta su debilidad mental como
jurodstvo. En ocasiones la convivencia en
los monasterios con personas de caracteres tan particulares crea conflictos como los relatados en la
vida de Antonij Alekseevič Monkin (PE 1), que tuvo que abandonar por un tiempo el monasterio y
vivir con unos parientes. La información no es explícita sobre la naturaleza de estas desaveniencias.
Los
jurodivye descritos no parecen a simple vista especialmente conflictivos al no dar muestras del
escándalo y la provocación que en otras ocasiones ha caracterizado al fenómeno.
Se remarca el carácter voluntario del fenómeno registrándose la solicitud de permiso a
autoridades eclesiásticas para realizar el
jurodstvo, momento común a gran parte de estos
jurodivye
ejemplificado en la vida de Evfrosinija Koljupanovskaja (PE 3) o en el beneplácito concedido por el
recluso Georgij Alekseevič Mašurin a Antonij Alekseevič Monkin (PE 1) y a Asenefa (PE 5).
Al acentuarse el momento de la toma de la locura como decisión voluntaria inevitablemente
la vida de los
jurodivye se divide en dos partes, la primera es una vida razonable, religiosa y
responsable seguida tras la toma de la decisión de un abandono voluntario de la razón
y la entrega al
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ascetismo. Adrian Jugskij (PE 4) es un ejemplo claro pasando de ser un religioso ejemplar que
ejerce cargos de alta responsabilidad a ser expulsado del monasterio debido a su pérdida de razón.
De forma similar Ioann Bosoj (PE 7) rompe con una prometedora carrera en la administración
estatal para entregarse a la locura. El caso de Varvara Skvorčichinskaja (PE 9) refleja la misma
división: tras una vida normal dedicada al estudio y al trabajo como profesora pierde la cabeza y
comienza su ascetismo.
Las causas por las que se toma esta decisión voluntaria no son siempre claras. En los textos
se justifican mediante un trasfondo religioso heredado de las familias de los
jurodivye o manifiesto
en su persona desde su infancia como en el caso de Andrej Meščovskij (PE 2). En
otras ocasiones la
ruptura con el mundo de la razón viene de la mano de un suceso traumático como el rechazo sufrido
por Anna Peterburgskaja (PE 6) al abandonarla su prometido por otra mujer o los traumáticos
arrestos sufridos por Varvara Skvorčichinskaja (PE 9) que la impulsaron a encerrarse en su hogar,
temerosa de salir a la calle y obligada por las persecuciones antirreligiosas a llevar una vida en la
clandestinidad.
La falta de tendencia hacia los comportamientos escandalosos y la voluntariedad de la sin
razón tiene como resultado un elaborado discurso justificativo que dota de explicación los hechos
de los
jurodivye adentrándose en su simbología. Por ejemplo los actos escatológicos de Evfrosinija
Koljupanovskaja (PE 3) son justificados como una expresión simbólica de su rechazo a la vida
cortesana, del mismo modo Varvara Skvorčichinskaja (PE 9) vive voluntariamente en un sucio
cobertizo haciendo patente su rechazo a las ayudas ofrecidas por las autoridades soviéticas.
La voluntariedad del ascetismo implica el reconocimiento del esfuerzo ascético. En la
historia del
jurodstvo se recompensa a los ascetas con el don de la curación y la adivinación. Del
mismo modo sucede en los casos estudiados pero además estos
jurodivye son recompensados con la
evolución a un ascetismo superior: el
starčestvo. La evolución mostrada por Antonij Alekseevič
Monkin (PE 1), Asenefa (PE 5) y Varvara Skvorčichinskaja (PE 9) muestra un proceso de
perfección religiosa que a su vez establece una jerarquía entre las distintas formas de ascetismo.
Tras una larga dedicación a la vida religiosa, el
starčestvo se convierte en la culminación de la
carrera religiosa, mientras que el
jurodstvo es una parte más de la evolución, aunque sigue estando
por encima del compromiso monástico o sacerdotal. Es interesante la transformación del
jurodstvo,
un ascetismo basado en la sin razón aparente, en el
starčestvo, ascetismo que se basa en la sabiduría
del que lo profesa y en su transmisión a los demás de su comprensión superior del mundo que los
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